Después de una romántica pedida de mano en un enclave idílico, en la Fontana de Trevi en Italia, Miriam y Rubén, se dieron el “Sí, Quiero” en una bonita celebración al aire libre en los jardines del Castillo Bonavía el 23 de Junio de 2018.
Sus comienzos
Toda pareja tiene una historia única que contar y Rubén y Miriam no iban a ser la excepción.
Se conocieron hace casi 5 años, y fue Rubén el que se lanzó a dar el primer paso.
Las primeras impresiones son las que cuentan (¡o por lo menos eso dicen!) y Rubén quería llamar la atención de Miriam a toda costa, así que se inventó que era torero. Una decisión arriesgada y polémica en los tiempos que corren por otro lado, sin conocer si a Miriam le gustaban los toros…
No sabemos cómo acabó la conversación, si la pasión por el mundo taurino hizo el resto o más bien lo contrario, si se enzarzaron en un debate polémico sobre los derechos de los animales y el mundo de los toros, hasta que el novio tuvo que confesar que no tenía nada que ver con ese mundo…
El resultado sin embargo, sí lo conocemos. Miriam y Rubén son felices desde entonces y quisieron compartir esa felicidad con todos sus allegados en un emotivo y emocionante día.
Una emotiva y divertida boda con alguna que otra sorpresa
Sin dudarlo Miriam nos cuenta que el momento de intercambiarse el “Sí, quiero”, el discurso de su hermano durante la ceremonia y la entrega de los regalos, sobre todo a su padre fueron unos de los momentos más emotivos.
Pero también los hubo divertidos y momentos sorpresa, como el que les brindaron los amigos durante el corte de la tarta nupcial ¡cuando se lanzaron a cantar!
Pequeños pero grandes detalles
Hacer que una ceremonia sea única, se puede conseguir incluyendo por ejemplo, un ritual simbólico y especial, como es de la ceremonia de la rosa.
Pero también son detalles las canciones especiales dirigidas para los grupos de invitados, regalos personalizados para las amigas de la novia, y muchísimos más. Especialmente vamos a mencionar uno que nos ha conquistado y tiene que ver con el ramo de la novia, al que posteriormente la novia regalaría a su mejor amiga. El ramo de novia contenía un camafeo con dos fotos: la de la madre de la novia y la de la madre de su mejor amiga, ambas ya fallecidas.
En definitiva, una emotiva y divertida boda donde no faltó de nada, para una pareja de lo más normal 😉 y que como dice la novia donde ‘todo fue perfecto’.
Que hermosa novia, que linda pareja y que bella ceremonia, me enorgullezco de tenerlos como familia. Que ese amor que crece en vuestros corazones, se haga adulto con vosotros.! Mil bendiciones.!